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domingo, 22 de marzo de 2009

Superar el "analfabetismo cibernético" para proteger a los hijos en Internet

Para proteger adecuadamente a los menores, los padres han de poder transmitir a sus hijos qué riesgos hay en Internet. Es por tanto imprescindible que superen el "analfabetismo cibernético" que muchos padres comienzan a notar frente a la creciente destreza de los menores en las nuevas tecnologías.

Es una conclusión que extraen los fiscales Nicolás Pérez Serrano y José Díaz Cappa en una comparecencia en el Parlament balear para exponer los derechos y riesgos de los menores ante las nuevas tecnologías. Ambos expertos reconocieron que los padres y los centros escolares "no están preparados" para asumir este grado de vigilancia, que supondría dar un paso más en la investigación de delitos a través de la red, con especial atención en aquellos que puedan dañar a menores.

Pérez y Díaz recalcaron la necesidad de impulsar la formación y prevención continua desde los colegios y las familias para prevenir a los menores de los delitos que se cometen a través de Internet, puesto que este colectivo es especialmente vulnerable a las nuevas tecnologías. Así, ambos coincidieron en afirmar que es "necesario" que los jóvenes sean conscientes de los peligros que puede hacer un uso "ilícito" de Internet.

A su juicio, cuatro son los delitos cibernéticos más frecuentes: la intrusión -contra la confidencialidad-, delitos de falsificación, de contenido -como es la pornografía infantil, aunque informó de que en este apartado también se incluyen las injurias, amenazas, y contenidos xenófobos y racistas-, y los delitos contra la propiedad intelectual.



Fuente: europapress.es

lunes, 16 de marzo de 2009

Apenas el 5% de los menores argentinos navega en la red con control parental

Según una encuesta de Microsoft entre más de 3.300 usuarios acerca del hábito de los menores en la red en Argentina, el 34% de los menores de edad afirma haber conocido personalmente a un contacto con el que solo tenla una relación virtual. Por otra parte, el 55% comparte sus fotos públicamente en la web.

"Conforme avanza la edad, decrecen las medidas de seguridad que se adoptan ante un extraño. De este modo, menos del 5% de los menores de entre 14 y 18 años lee las políticas de privacidad; un 10% responde a conversaciones con extraños y sólo el 25% abandona la conversación. En la misma línea, el informe señala que el 59% de los encuestados se comunicó con un desconocido que aceptó en su chat, y este porcentaje se incrementa en el caso de los menores alcanzando el 75%. El 81% de los encuestados, que refirieron ser padres de familia, afirmaron que hay pautas claras en su hogar sobre el uso de Internet y la información que se debe compartir".

Fuente: portinos.com.ar

jueves, 5 de marzo de 2009

Qué pasos dar para mantener la privacidad en Internet

¿Cómo pueden conseguir unos padres que una fotografía de su hijo menor de edad, o sus datos personales sean borrados en Internet? La guía que ha editado Ernst & Young Abogados, ofrece los pasos a dar.

Aunque la información que se haya publicado se haya conseguido de forma legal (publicidad, compras online, etc.) “ningún ciudadano, que ni goce de la condición de personaje público ni sea objeto de hecho de relevancia pública, tiene que resignarse a que sus datos personales circulen por la Red”, afirman desde la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD). “Siempre tendrá derecho a pedir la cancelación”.

Si fuese una web cuyo titular está en territorio español la información debería localizarse en la Política de Privacidad de la web, su Aviso Legal o en el organismo público Red.es. Si se tratase de una web extranjero debería dirigirse a la base de dominios www.whois.com.

Una vez localizado deberá pedirle por escrito y de forma que se acredite que esta petición ha sido enviada, que “retire de forma inmediata ese comentario o imagen que vulnera sus derechos fundamentales”. En el caso de que el titular no proceda con la petición, el segundo paso es denunciar o, si no se están vulnerando los derechos fundamentales, pedir un “procedimiento de tutela de derechos” a la AEPD para que se retiren sus datos.

A partir de aquí se pueden tomar dos caminos: acudir a los organismos especiales creados para estos fines (Brigada de Investigación Tecnológica de la policía y el Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil) o bien a la AEPD. “Para poder efectuar correctamente la denuncia y aportar pruebas suficientes, es importante recoger toda la información y evidencias del tratamiento de nuestros datos, que podamos”, explica Cristina Quesada, Gerente de Ernst & Young. “Por ejemplo, —añade— una impresión de las pantallas del sitio web donde se publica nuestra información personal o los emails de comunicación que este portal tenga con nosotros, así como otras comunicaciones que creamos que pueden estar relacionados y que no hayan sido directamente recibidos del propio portal web.” La indemnización puede ir desde la retirada de la información, hasta el cierre de la página y una multa que puede oscilar entre 600 y 600.000 euros. En el caso de las imágenes o los vídeos se sigue el mismo procedimiento: pedir la retirada y, en caso de negación, denunciar.

Desde el bufete de abogados advierten que “si no eres el protagonista de la fotografía, tu imagen sale en segundo plano y está tomada en un lugar público es complicado reclamar daños y perjuicios". Aunque hace un mes escaso se hizo pública la segunda sanción de la AEPD por “la captación y difusión de imágenes sin consentimiento a través de sistemas como YouTube”, multando con 1.500 euros a los responsables de grabar y colgar un vídeo en el que varios jóvenes se burlaban de un discapacitado psíquico. En la guía aclaran que “aunque la web retire la información, puede quedarse en otros sites y permanecer en la memoria caché y las hemerotecas virtuales”.

Fuente: gaceta.es

miércoles, 4 de marzo de 2009

Mona O´Moore: "el mejor control parental es la educación"

Mona O'Moore fundadora del Centro Anti-Bullying en el Trinity College de Dublín, considera que el mejor tipo de control parental que puden ejercer unos padres es la educación de sus hijos. La escuela "no sólo debe centrarse en educar en las materias comunes, sino que ha de preparar a todas estas personas a enfrentarse al acoso escolar y al ciberacoso". O´Moore fue una de las ponentes de las III Jornadas sobre Menores en Edad Escolar: Conflictos y Oportunidades, que se han celebrado en Palma de Mallorca,

-¿Qué se entiende por ciberacoso escolar?
-Es el acoso a través de teléfono móvil, mensajes, correos electrónicos, chats, redes sociales como Facebook o Myspace... El acoso a través de los dispositivos electrónicos.

-¿Qué peligros conlleva frente al acoso tradicional?
-Puede afectar a todo el mundo, en cualquier lugar. No hay lugar seguro para ningún niño. Es muy problemático porque es anónimo, llega a todo el mundo y además es permanente, queda grabado.

-Usando el título de su conferencia, ¿cómo tratarlo?
-Es un proyecto de toda la escuela, ha de implicar a todas las personas: profesores, niños, familias y a toda la comunidad. Además, la escuela no sólo debe centrarse en educar en las materias comunes, sino que ha de preparar a todas estas personas a enfrentarse al acoso escolar y al ciberacoso. La clave es educar, no controlar, ni censurar. No poner restricciones al uso del móvil ni de internet.

-¿Qué incidencia tiene?
-En Irlanda están implicados el doble de alumnos en el tema del ciberacoso que en el acoso tradicional. Es un fenómeno emergente. Hablamos de un 18% del alumnado. Se produce más entre las chicas (un 10%) que entre los chicos (un 4%). El otro 4% se refiere a alumnos que están en los dos lados, como acosadores y como víctimas.

-¿Es frecuente pasar de víctima a acosador?
-Se da sobre todo en los alumnos que tienen un carácter más problemático.



Fuente: argijokin.blogcindario.com

lunes, 2 de marzo de 2009

Cuando los padres están fuera de juego en Internet

Podemos dividir en dos los grupos de padres según su actitud ante el fenómeno de las redes sociales y el uso que de ellas hacen sus hijos. Por un los padres apocalípticos que se muestran en contra y presumen que sólo le dejaban a su hijo el ordenador para los videojuegos, la música o algunas pelis. Por otro lado, están los integrados,tgendentes a creer que no pueden poner puertas al campo y que ante las redes sociales sólo cabe negociación.

Los usuarios no tienen conciencia de que las redes hayan sido pergeñadas por malignos depredadores con la finalidad de atrapar nuestros datos para comerciar con ellos sin escrúpulos. Han descubierto una peligrosa continuidad entre lo real y lo virtual cuyas consecuencias no han calculado. Tampoco han tenido a nadie que les oriente, enseñe, dirija o eduque. ¡Aquí sí que los padres saben menos que un niño de primaria!

Cuando cada semana comprobamos que casi 8.000 personas se registran en estas redes y cuando Facebook con 175 millones de usuarios está a punto de alcanzar a MySpace que ya cuenta con 200 millones, el problema no está en las redes sino en los padres y los maestros que están, literalmente, fuera de juego. Los problemas relacionados con el uso de la información de los menores, con la gestión de la información que libremente se ha volcado ahí y con las consecuencias del uso no han hecho más que empezar.

Si un padre tira la toalla de la educación y le ha puesto a su hijo un televisor en su habitación, un ordenador y una play con barra libre, no debiera sorprenderse de que su hijo tenga una cita con quien, para usted, es un desconocido.

Fuente: lasprovincias.es